El Gobierno venezolano prohibió la compra, venta y uso de drones en todo el país por treinta días prorrogables luego que el líder del régimen, Nicolás Maduro, anunciara el despliegue de 4,5 millones de milicianos como respuesta al envío de buques destructores estadounidenses en las aguas del Caribe cerca de Venezuela.
A través de un comunicado, el ministerio de Transporte venezolano anunció que “ante el deber del Ejecutivo Nacional de regular y controlar la navegación en el espacio aéreo de aeronaves y objetos no tripulados”, se dispuso suspender la compra, venta, fabricación, importación, distribución, instrucción, capacitación, adiestramiento, registro y las operaciones de vuelos relacionadas con aeronaves pilotadas a distancia (RPA, drones), así como sus partes y componentes.
La medida, publicada en la Gaceta Oficial del país, estipula que quedarán exentos de la prohibición “los organismos de seguridad ciudadana y de defensa de la nación”.
Maduro anunció el martes que desplegará 4,5 millones miembros de la Milicia Nacional -quinto componente de la Fuerza Armada Nacional Bolivariana- luego que el Gobierno de Trump comenzara a movilizar fuerzas antinarcóticos en el Caribe y aumentara a 50 millones de dólares la recompensa por información que lleve a su captura.
En un encuentro con los dirigentes del Partido Socialista Unido de Venezuela, Maduro dijo que esta medida forma parte de un “plan de paz”, por lo que hizo un llamado a las milicias a estar “preparadas, activadas y armadas”.
Tal como detalla RFI, la milicia venezolana es un componente civil armado compuesto por funcionarios públicos, oficiales retirados, sindicatos y otras organizaciones del chavismo que han recibido formación militar.
Karoline Leavitt, ortavoz de la Casa Blanca, aseguró que EEUU está preparado para “usar todo su poder” para frenar el “flujo de drogas hacia su país” tras ser consultada respecto al despliegue de tres buques destructores estadounidenses con 4.000 soldados en las aguas del Caribe.
De acuerdo a fuentes de Reuters, los buques USS Gravely, el USS Jason Dunham y el USS Sampson arribarán a las costas de Venezuela en las próximas horas.
El envío de estas embarcaciones forma parte de un plan de Washington para combatir amenazas de cárteles de droga latinoamericanos, en especial el Cartel de los Soles, cuyo líder -según el presidente Trump- es precisamente Maduro.